La ministra de Educación, Lucy Molinar, descartó este miércoles una extensión del año escolar 2025 para recuperar contenidos tras el paro de 80 días que afectó al sistema público de educación.
La titular del Ministerio de Educación (Meduca) se refirió al tema durante una entrevista con la televisión local este miércoles, un día después de que la Unicef y la Unesco sugirieran alargar el actual año escolar en los centros educativos más afectados por el paro.
Extender el año escolar “es una falacia que ellos mismos (los docentes) están conscientes de que no es real, nunca han recuperado, nunca se ha recuperado un día perdido”, declaró Molinar a la cadena Telemetro.
Argumentó que existen “diversas estrategias para usar el tiempo que queda con la suficiente profundidad como para que no se pierda contenido, que funcionan”.
“Alargar el año para poner un par de días más es castigar al padre de familia, es castigar al estudiante, es castigar a esos docentes que estuvieron allí (en las aulas pese a llamado a paro de los gremios) y que son la mayoría”, añadió.
La ministra además alertó que “está en juego la pérdida del año” en algunas escuelas donde persisten irregularidades en las clases, como en una de la capital en donde los alumnos supuestamente rechazan a maestros sustitutos asignados por el Meduca.
“Un día más perdido a partir del lunes y se cierra el año escolar en esas escuelas. No podemos engañarnos, no van a salir bien preparados y no podemos darle a la sociedad una mentira”, expresó la ministra.
Los gremios docentes del sector público, que atiende a cerca de 700.000 estudiantes de primaria y bachillerato, iniciaron el pasado 23 de abril un paro que se desarrolló de manera irregular y que culminó oficialmente el pasado 11 de julio, con la firma de un acuerdo con el Ministerio de Educación y sin que se lograra el objetivo de tumbar una reforma de las pensiones.
El acuerdo entre el Meduca y una veintena de sindicatos docentes incluye el no pago de los días no laborados por los maestros y que se mantengan los procesos administrativos iniciados en contra aquellos que se ausentaron de las escuelas.
“Tenemos que sentar un precedente como sociedad, tenemos que poner al estudiante primero (…) yo quisiera que este proceso que estamos viviendo ahora nos permitiera recuperar el sistema educativo y ponerlo al servicio de la educación de nuestros estudiantes, de donde nunca debió salir”, afirmó Molinar.
En su comunicado del martes, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia o Unicef y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura o la Unesco, dijeron reconocer que esta “crisis” del sector educativo panameño “puede ser vista como un catalizador de reformas profundas así como también como una oportunidad para implementar estrategias que aumenten el acceso y la calidad de la educación para todas las poblaciones por igual”.
Ambas organizaciones, que celebraron el fin del paro, lamentaron asimismo “que el derecho a la educación de miles de niños, niñas y adolescentes se haya visto afectado, lo que ha ampliado la brecha entre quienes pudieron continuar aprendiendo y quienes no tuvieron acceso a la educación en los centros educativos”.
El paro de 80 días “se suma a la pérdida de más de 500 días de clases desde la pandemia” de la covid-19, dijeron los entes de la ONU, en referencia a otros paros sindicales que desde 2022 han afectado a las escuelas públicas sin que los reclamos hayan tenido que ver con el sistema educativo.
“El rezago de los aprendizajes puede contribuir a afectar la permanencia y la continuidad de las trayectorias educativas”, sostuvieron la Unicef y la Unesco, tras reiterar la “disposición para apoyar al Sistema Educativo Panameño para contribuir a la recuperación de los aprendizajes”.