El volcán Chaparrastique de El Salvador tiende a bajar su actividad, pero aún es una amenaza tras la repentina erupción del domingo pasado, en una nueva señal de la vulnerabilidad del territorio salvadoreño por su origen volcánico.
"Todavía es demasiado temprano para decir que esto ya pasó", advirtió el ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Herman Rosa Chávez.