Briceida Menguisamá, de 35 años, recuerda que emigró de su natal Darién en busca de una mejor calidad de vida, y se instaló en Altos de La Torre #1. Cuando llegó a esta comunidad tenía 10 años, por lo que creció cargando el agua en cubos desde lugares muy lejanos a su hogar.
Para su familia y para ella, era muy difícil, ya que hasta tenían que esperar que cayera la lluvia si querían lavar, fregar, cocinar y hasta para tomar la utilizaban.