Apóyelos
No penalice los errores ortográficos, pero sí aliente la autocorrección y el uso de un diccionario en clase.
Enseñe técnicas de estudio, planificación y memorización. Supervise su uso a menudo.
Haga cambios ambientales y curriculares.
No prejuzgue al niño calificándolo de vago, desinteresado o desidioso.