Lo panameño no le favorece nadita
¡Fea, fea, fea! Sí, no sé que está comiendo, bebiendo o tirándose encima esta modelito porque ¡che! ahora que regresó a Panamá se le fue la belleza y la sensualidad que desbordaba en redes. Ese encueramiento y aquel cuerpo escultural quedó en el pasado y en los filtros de Instagram, porque en la real de la leyenda, en vivo y a todo color, es otra cosa. Ni se acerca a la "guial" de la foto. En estas semanitas quedó demostrado que es una panameña más con acento prestado y que toma mate. ¡Ubícate!





