Miembros del personal del zoológico de Copenhague dicen haber recibido amenazas de muerte después de que ese centro sacrificó a una jirafa sana de dos años para destazarla y darles sus restos a los leones.
El portavoz del zoológico, Tobias Stenbaek Bro, dijo ayer que él y el director científico del zoológico, Bengt Holst, han recibido varias amenazas por teléfono y por correo electrónico.
Todos los hijos de los trabajadores del zoológico de Copenhague deben ser asesinados o deberían tener cáncer, según un correo.