Actualmente, en Panamá no se consideran los embarazos como una condición de alto riesgo; pero se ha demostrado que existen complicaciones que padecen las féminas embarazadas y positivas de COVID-19.
Neumonía severa, perdida de embarazo, aborto o muerte fetal, restricción del crecimiento fetal, preeclampsia de inicio temprano, retraso del desarrollo neurosensorial, son algunos de los factores que limitan un desarrollo pleno en este periodo.